A veces me obsesiona. Es lo primero que envejece en un
iPhone y en el resto de dispositivos electrónicos: la batería. Su tecnología a grandes rasgos sigue siendo la misma desde el
iPhone original hasta el
iPhone 16. Y si tienes mi edad, es posible que hayas estado cargando baterías de tu
iPhone desde 2008, o incluso antes si ya caminabas con un
iPod en el bolsillo. Es por eso que los buenos hábitos para cuidar el teléfono de Apple permanentemente se enfocan en su batería.
Es por eso que, fruto de la experiencia de esas cargas y lo que me preguntan mis clientes sobre cómo hacerlo de la mejor forma posible, tengo una serie de reglas para todos aquellos que queráis maximizar la vida de la batería del
iPhone. Son sencillas y pueden tener muchos beneficios a largo plazo.
La carga por inducción que te ofrece el
iPhone vía sus bases MagSafe o cualquier cargador que cumpla con los estándares Qi es muy cómoda, porque te permite simplemente dejar el dispositivo en una peana o base para cargarlo. Ahora bien, es una solución que puede degradar más tu batería porque la obligas a laborar más durante la carga. Eso además hace que la temperatura del terminal suba más, y si no alineas bien el
iPhone sobre la base además pierdes eficiencia.
No estoy diciendo que tires a la basura todos tus cargadores inalámbricos. Simplemente, si quieres que la batería de tu
iPhone aguante más años, busca priorizar permanentemente la carga por cable.
Ya, tan fácil como eso.