Nueva semana y una vez más hemos podido ver cómo 'Dune: La profecía' se sumerge por el universo creado por Frank Herbert tal y como Denis Villeneuve plasmó en pantalla. El capítulo de esta semana, 'Dos lobos', nos lleva a un ritual algo precipitado en su ejecución pero en el que se proclama una profecía (como no podía ser de otra manera). Spoilers a partir de aquí.

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Y lo hace de un modo que enlaza por completo con 'Dune Parte Dos' ya que presenciamos una forma temprana del ritual al que se somete Lady Jessica (Rebecca Henderson) en el filme de Villeneuve con tal de convertirse en la Reveranda Madre de los fremen: el beber el Agua de la Vida. Este líquido elemento que no es otra cosa que segregaciones de gusano de arena, altamente venenosa.

El neutralizar este veneno es una de las habilidades de las Bene-Gesserit y, diez mil años antes, de esta Hermandad. Así, en 'Dos lobos' vemos cómo la joven acólita Lila (Chloe Lea) se somete al ritual de la Agonía: beberá el agua de la vida para desbloquear su potencial genético y ayudar a guiarlas en la investigación. Todo sale  mal y cae en un coma.

Esto en lo que la muchacha ve cómo Valya mata a su abuela y además esta fallecida profetiza a través de ella: «El que os juzgará fue dos veces nacido, una de sangre y de especia ungido. Un espectro lleno de cicatrices.