Se acaba de estrenar en
SkyShowtime y Movistar+ la que probablemente sea la serie definitiva sobre el
Satanic Panic de los 80, una producción de Peacock que tiene parecidos razonables con la temporada 4 de "Stranger Things", dada su trama de una pequeña comunidad de Estados Unidos que va en busca de un grupo de chavales de instituto por tocar música rock, con paralelismos obvios con la caza de Eddie Munson en el buque insignia de Netflix.
En este caso toma una ruta diferente, pero la presencia de Bruce Campbell y su tono de comedia de terror la convierten en una de las novedades más refrescante en televisión de género de este año. Su trama sigue a un grupo de Heavy Metal de un pequeño pueblo que decide aprovechar el temor por el ocultismo generalizado por los medios de comunicación para labrarse una reputación como banda satánica, hasta que una extraña serie de acontecimientos desencadena una caza de brujas que conduce a ellos.
Entre extraños asesinatos que podrían esconder algo realmente sobrenatural y diversas intrigas domésticas hay cierto tono de serie juvenil al uso, aunque la presencia de Campbell en la serie pueda recordar a "Ash vs Evil Dead". Hay detalles similares de estética e incluso alguna subtrama de aquella mezclaba las sectas esotéricas y los malentendidos con persecuciones de turbas en pueblos rurales, pero lo cierto es que quien espere la fiesta gore asociada a los trabajos del actor no va a encontrar nada similar.