Hace unos días, una usuaria se ponía en contacto con el
Instituto Nacional de
Ciberseguridad (INCIBE) a través del número de asistencia 017, alarmada por lo que había sucedido mientras intentaba vender su coche a través de una conocida plataforma de compraventa.
Tras publicar el anuncio, un supuesto comprador contactó con ella, mostrándose interesado en adquirir el vehículo. Luego de una breve conversación, el comprador se ofreció a pagar una señal de 500 euros a través del popular sistema de pagos
Bizum.
Para completar ese paso, el comprador le envió un enlace de
Bizum que la usuaria aceptó, pensando que aceptaba la recepción del pago. A continuación, hasta el punto de que el comprador llegó a ofrecerse a realizar un segundo pago, lo que finalmente despertó las sospechas de la víctima.
La tecnología ha abierto las puertas a nuevos métodos, cada vez más complejos, que se aprovechan de la falta de conocimiento y la confianza de los usuarios para llevar a cabo estafas cada vez más sofisticadas. Uno de los más comunes es el llamado 'fraude inverso de Bizum', el usado en este caso por el falso comprador.
Esta es una modalidad de estafa que ya se ha vuelto habitual en las plataformas de compraventa online. Los estafadores aprovechan la rapidez y sencillez del sistema
Bizum para engañar a sus víctimas.
El riesgo de esta estafa radica en que las transacciones realizadas a través de
Bizum son prácticamente irreversibles.