La vida a veces nos da lecciones de humildad inesperadas. Y es que ser el hombre más rico del planeta aunque ya veremos cuánto le dura el título con el hundimiento en bolsa de sus coches eléctricos y, no te libra de comerte un bulo del tamaño de la catedral de
León y reaccionar pataleando como un quinceañero contrariado en la red social que has comprado con tu fortuna.
Esto es, precisamente, lo que le ocurrió a
Elon Musk cuando leyó el rumor de que la nueva 'Piratas del Caribe' sería un reinicio de la franquicia en el que
Ayo Edebiri sustituiría a Johnny Depp y a su eterno Jack Sparrow como protagonista de la función; algo de lo que nos hicimos eco hace cosa de un año subrayando la dudosa credibilidad de la afirmación.
El día que Hans Zimmer titubeó con una banda sonora y un héroe anónimo salió a ayudarle. Se convirtió en uno de los compositores contemporáneos más populares
Pues bien, los enésimos ataques de Musk a La Casa del Ratón en la anteriormente conocida como Twitter, tan sesudos y elaborados como el "Disney apesta" que publicó, tuvieron una víctima no tan inesperada.