Hace casi nueve años que se lanzó
Fallout 4. Fue anunciado en el E3 2015 y el 10 de noviembre del mismo año llegó a nuestras consolas (PS4 y Xbox One) y PC. Había jugado a
Fallout 3 y
New Vegas, pero entonces no tenía tanta experiencia en la franquicia como ahora. Aun así, la cuarta entrega de la franquicia se convirtió en uno de mis lanzamientos favoritos del año. Y eso que
The Witcher 3: Wild Hunt se lanzó unos meses antes.
No sabía decir cuántas horas pasé por entonces recorriendo el yermo de
Fallout 4, pero estoy seguro de que ronda las 300-400 horas sin problemas. No solo completando la historia principal y muchas misiones secundarias, sino tratando de localizar todas las localizaciones y de dominar el Mar Resplandeciente. Si eres veterano, ya conocerás esa pesadilla. Si acabas de empezar, solo te diré que vas a disfrutar mucho cuando logres equiparte para pasar dentro más de cinco minutos.
Desempolvar mi edición física de
Fallout 4 ha sido muy emocionante, pero no tanto como iniciar la versión de PS5 para encontrarme con el primer guantazo de nostalgia: el icónico menú con la Banda Sonora de la franquicia. Hay pocos menús que se hayan quedado tan incrustados en mi mente como este. Es imposible olvidar la imponente Servoarmadura en el taller del
Red Rocket.
A continuación de repasar los ajustes y comprobar que tengo todo lo que necesito (agua, frutos secos...