Aligerar el peso de los
iPhone más grandes, darles una mayor resistencia y de paso una estética diferente fueron las razones por las que, hace casi dos años y de la mano de los
iPhone 15 Pro, Apple presentó el titanio como material más importante en el cuerpo de los dispositivos. Algo que, por cierto, imitaron a continuación otros fabricantes.
En septiembre de este año, el asunto podría dar un giro de 180º y lo que apuntaba a ser el estándar de los mejores
iPhone se quedaría en una exclusividad del que será el smartphone estrella de la compañía (pese a que no vaya a ser el mejor). El
iPhone 17 Air "huele" mucho a titanio y tiene sentido que así sea. No tanto lo que parece que sucederá con el resto de
iPhone 17.
El llamado a ser el
iPhone más delgado de la historia de Apple necesita ingredientes que le permitan, además de eso, ser ligero. No será el que menor peso tenga, pero desde luego tendría poco sentido encontrarnos ante un terminal sumamente delgado y que sin embargo resulte pesado. Ahí el titanio tiene mucho que decir.
Tal y como la física nos dice, y la propia Apple remarca cada vez que habla de los materiales de sus últimos
iPhone 'Pro', el titanio es un material fuerte, pero ligero. Eso implica que es un material mucho más ligero y resistente que el cristal, acero y aluminio que Apple acostumbró a usar durante años en previos generaciones (y que de hecho aún usa en versiones estándar y 'Plus').