Los
Vengadores, Star Wars, el universo cinematográfico de
Quentin Tarantino... Samuel L. Jackson se ha ganado el privilegio de poder ser muy selectivo con sus papeles: de Nick Furia a Frozono, pasando por
Jules Winnfield en
Pulp Fiction y todo lo que hay entre esos tres vértices. Jackson no solo interpreta papeles icónicos para los mejores directores del mundo: los clava. ¿Y si te dijese que cuando George Lucas lo fichó para su galaxia muy, muy lejana se conformó con llevar un ratito una armadura de soldado de asalto?Â
Lucas imaginó al poderoso Mace Windu mucho antes de que existiesen los guiones definitivos de La Guerra de las Galaxias (o, como se la conocerá luego, Una Nueva Esperanza), y aquel personaje se quedó en un cajón durante décadas... Hasta el estreno de Star Wars: La amenaza fantasma. En el año 1999 LucasFilm añadió montones de elementos al trasfondo de la saga, incluyendo el Templo Jedi y, el lo alto del mismo, el propio Consejo Jedi. El lugar de máximo honor de la orden en el que, por cierto, había un asiento reservado para el Mace Windu. O, más bien, para Samuel L. Jackson.
Lo verdaderamente curioso es que, como contará el propio Samuel L. Jackson, no tenía la menor idea de que ese papel iba a ser para él. De hecho, hasta se llevó una sorpresa al enterarse que iba a hacer de Jedi. Y si no te defiendes en inglés, te lo explicamos justo debajo.