El bautizo de la productora de los directores de "El proyecto de la bruja de Blair" (1999) daba una pista de por dónde iban a ir los tiros de su proyecto secreto cuando estaban preparando la forma de sorprender al mundo. Haxan films tiene en su nombre dos pistas de lo que cocinaban: las brujas y el formato de falso documental, ambas adeudan a una seminal película de culto que más de 100 años después permanece como un artefacto fascinante de la época del cine mudo. "Häxan" es un film maldita por la dificultad que hubo para encontrarla durante años, pero hoy tiene una nueva reputación gracias a su accesibilidad, de hecho puede verse gratis en distintas plataformas.
En 1922, mientras F.W. Murnau creaba su adaptación no autorizada de "Drácula" destinada a cambiar el cine de terror, el director danés Benjamin Christensen culminaba la que se convertiría en una de los filmes más innovadoras y controvertidas de la era muda. "Häxan: la brujería a través de los tiempos", producida por la compañía sueca Svensk Filmindustri, surgió como un insólito híbrido de documental, ensayo visual, terror y cine experimental, aunque aparentemente no dejó una estela tan reconocible como "Nosferatu" en la historia del género.
Fue una producción sin precedentes en su época.