Su segunda film como 007 fue dirigidla por el suizo Marc Forster (primer director no británico en hacer un film de la saga), y fue la que trató de establecer una continuidad emocional y narrativa para el personaje, algo que no era prioridad hasta entonces. Hoy se puede ver en televisión a través de La 1 a partir de las 22:50 este blockbuster que tuvo una producción complicada.
Tratando de superar su traumático pasado con su antiguo amor, 007 recibe una nueva misión por parte de la inteligencia británica que le hará lidiar con una compleja organización. Un poderoso y despiadado hombre de negocios tratará de hacerse con el control del recurso más preciado de todo el planeta: el agua. Bond se pondrá a la caza para evitar que lleve a cabo su plan, que implica desestabilizar los gobiernos mundiales, contando con una improbable ayuda para ello.
Organizar toda la trama secreta y criminal en torno al agua trataba de ser una referencia a "Chinatown". Un guiño que es lo más cerca que está "Quantum of Solace" a ser un refinado entretenimiento, ya que termina sufriendo por la inexperiencia de su director en el apartado de acción y un rodaje que quedó completamente trastocado al empezar sin un guion terminado.
El filme entró en producción en plena huelga de guionistas, allá por 2007, y la tarea de terminar el guion e ir retocándolo que recaería en un escritor terminó siendo realizada a cuatro manos por Forster y
Craig.