2025 está siendo un año tremendamente convulso para la industria audiovisual. A la sequía de producciones en
Los Angeles, que ha desatado todas las alarmas habidas y por haber entre gremios y sindicatos y que ha llegado luego de los devastadores incendios que han arrasado
California, debemos sumar el cierre de algunas de las compañías más prestigiosas del medio.
Cuando aún no se cumple un mes desde que la eterna
Technicolor anunciase su cese de tarea y consiguiente cierre tras no encontrar inversores para mantenerse a flote, productora y financiera independiente tras no pocos largometrajes reverenciados por público y crítica, se ha declarado en bancarrota tras una dura disputa legal con Warner Bros.
La empresa, que tiene en su haber títulos de la talla de 'Matrix', 'Joker', 'Mad Max: Furia en la carretera', las sagas 'Ocean's' y 'Sherlock Holmes' o joyas de Clint Eastwood como 'Sully', 'Gran Torino' o 'Mystic River', intentó recortar gastos y una posterior venta en 2023. No obstante, esta operación quedó bloqueada debido a un arbitraje con Warner Bros.