Dos de los personajes más conocidos de nuestro país se han dado cita en un mismo espacio. No habían quedado, pero allí se encontraron. Ortega Cano, el torero más polémico de todos los tiempos, tuvo el placer de coincidir con una mujer a la que guarda especial cariño. Estaba emocionado, exaltado y agradecido. Toparse con Ana Rosa Quintana fue todo un regalo para el diestro, o al menos así lo demuestran los retratos.