El nuevo milenio le ha bajado la libido al séptimo arte. A pesar de que la irrupción de las plataformas de streaming en nuestras vidas ha incrementado notablemente los niveles de producción y distribución de largometrajes y, en buena medida, la libertad creativa de los mismos, el contenido sexual en los filmes ha disminuido drásticamente desde el año 2000 según el estudio del analista de datos especializado en cine Stephen Follows.